Febrero 18 2022
Café con Dios
“Entonces el Señor tu Dios te prosperará en todo lo que hagas. Te dará muchos hijos, una gran cantidad de animales y hará que tus campos produzcan cosechas abundantes, porque el Señor volverá a deleitarse en ser bondadoso contigo como lo fue con tus antepasados.”
Deuteronomio 30: 9 (NTV)
Es reconfortante en medio de estos tiempos conocer esta promesa del Señor; no solo somos animados, sino que cambiamos la perspectiva de nuestras vidas con tan solo dejarnos impactar por la bondad del Señor. Sin embargo, hay una palabra clave con la que inicia esta promesa “Entonces”, lo que quiere decir que hay algo en lo que debemos trabajar para activar dicha promesa sobre nosotros, y hoy vamos a descubrir qué quiere el Señor de nosotros para darnos todo y en abundancia.
Conversión y obediencia, ¿parece difícil? Pues ante esta gran promesa de Dios para nuestras vidas – es fácil, tal vez sea lo más sencillo que alguien te pide para garantizar que la obra de tus manos, tus negocios, tu salario, tu salud, el bienestar de tu familia y todo lo que te rodea sea impactado por la bondad del Señor.
La obediencia y la conversión nos lleva a complacernos en lo que Dios se complace, a amar lo que Él ama y odiar lo que Él odia, y cuando esto sucede, se materializa lo que está escrito en el pasaje bíblico de hoy, Él se deleita en derramar su bondad contigo.
Cuando escuchamos la abundancia que el Señor trajo sobre los grandes hombres de fe en las Escrituras pensamos que son solo historias, algo que está muy lejano a nuestro presente, pero resulta que ellas son una demostración, el testimonio del Poder de Dios para bendecir a quien Él escoja, tal y como hizo sobreabundar a Abraham, a José, a David, a Salomón y cada uno de ellos, lo hará con nosotros, porque su deleite es con nosotros, los hijos de los hombres.
Volver tu corazón al Él, es lo que pide el Señor, para mostrar Su Gloria en ti, más que tu sacrificio, el Señor quiere una acción sincera y voluntaria de tu corazón que haga que Su Reino de poder y Su buena, perfecta y agradable voluntad se establezca sobre tus finanzas, en el poderoso Nombre de Jesús.
Lectura bíblica:
1 Samuel 13